El año llega a su fin y las ciudades iluminan sus calles y monumentos para darle un toque festivo. Los taxis, sin embargo iluminan las calles de las ciudades todo el año, mostrando su disposición de servicio público. En estas fechas Madrid se llena de visitantes que pasean por sus calles para hacer las compras navideñas, ver la iluminación, disfrutar de las actividades de los más pequeños, y el taxi espera en paradas o circula por la calle al rescate de los viandantes para hacerles llegar de puerta a puerta de su trayecto, para que no pasen frio, para cargar con las compras,... Muchos nos eligen para disfrutar de un paseo por las luces navideñas y los monumentos iluminados para poder verlas sin pasar frio. Otros para llegar a tiempo a sus comidas y cenas de empresa para poder disfrutarlas y no tener que coger su propio coche si se han excedido con el alcohol. Todos confiando en este servicio público atendido por profesionales. A todos los usuarios presentes y futuro

Ya hemos empezado el último mes del año que nos anuncia que otro año al archivo de nuestra vida. Un camino lleno de mojones de experiencias y vivencias, que te recuerdan en que kilómetro paras a descansar o sigues hasta el próximo. Y hay mojones y mojones claro. Los caminos no nacen se hacen e incluso repararlos, ampliarlos. Quejarse del que te han marcado o te has marcado, no sirve, a no ser que quieras encontrarte la calle cortada. En este mes en el que recuerdas a los que se han ido y que disfrutas de los que aún están, unos y otros parte de tu camino y tus recuerdos. Esos recuerdos que algunos empiezan a perder pero que están. Que lastima construir toda una vida para luego olvidarla! Maldito Alzheimer!